Ámsterdam es uno de los destinos turísticos más populares de Europa y recibe a casi 9 millones de visitantes cada año. La ciudad alberga una variedad de museos, como el famoso Rijksmuseum, y cuenta con una animada vida nocturna. Es fácil viajar entre las dos ciudades en coche o en transporte público, lo que hace que una excursión de un día a Ámsterdam desde Bruselas esté al alcance de todos. Ámsterdam tiene algo que ofrecer a todo el mundo, ya sea explorar museos de talla mundial o simplemente sentarse a contemplar los canales con un café en mano.
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Ámsterdam es uno de los destinos turísticos más populares de Europa y recibe a casi 9 millones de visitantes cada año. La ciudad alberga una variedad de museos, como el famoso Rijksmuseum, y cuenta con una animada vida nocturna.
Es fácil viajar entre las dos ciudades en coche o en transporte público, lo que hace que una excursión de un día a Ámsterdam desde Bruselas esté al alcance de todos. Ámsterdam tiene algo que ofrecer a todo el mundo, ya sea explorar museos de talla mundial o simplemente sentarse a contemplar los canales con un café en mano.
Ámsterdam se encuentra en la provincia de Holanda Septentrional. La ciudad está a unos 210 kilómetros de Bruselas y el trayecto entre ambas cruza la frontera entre Holanda y los Países Bajos.
El trayecto en coche de Bruselas a Ámsterdam es fácil y relativamente rápido, puesto que dura alrededor de 2,5 horas. En primer lugar, tendrás que tomar la autopista E40 al este de la ciudad. Después de una hora aproximada, llegarás a la frontera holandesa en Roosendaal. Desde allí, continúa por la E25 dirección Ámsterdam.
Puedes coger un tren directo para ir de Bruselas a Ámsterdam. Los trenes salen desde la estación Bruxelles-Midi varias veces cada hora y el precio varía según la velocidad del viaje.
Se tarda aproximadamente tres horas en llegar a Ámsterdam y los billetes cuestan unos 53 €. Si quieres llegar a la ciudad en menos de dos horas, puedes optar por un tren de alta velocidad pagando unos 89€ por el billete.
Los recorridos de un día por Ámsterdam duran unas 12 horas y comienzan entre las 8 h y las 8:30 h. Estas visitas no suelen incluir la recogida en el hotel. Lo más habitual es que tengas que reunirte con tu grupo en el centro de Bruselas, normalmente cerca de la Grand-Place.
La mayoría de las excursiones de un día a Ámsterdam tienen un itinerario similar. En principio, te reunirás con tu grupo en el centro de Bruselas para viajar en autobús a Ámsterdam. Muchos recorridos hacen una parada por el camino para visitar una granja o fábrica de artesanía. Algunos también hacen otra parada para ver los molinos de viento por los que Holanda es tan famosa.
Una vez que lleguéis a la ciudad, haréis un recorrido a pie por una gran variedad de lugares de interés. Entre ellos, la Plaza Dam, el Palacio Real, el Mercado de Bloemen (el mercado flotante de las flores) y el Barrio Judío.
Al final del día, dispondrás de algunas horas para hacer lo que prefieras. Algunas de las mejores formas de disfrutar de tu tiempo libre son dar un paseo por los canales o por las boutiques del centro.
Al caer la tarde, volverás al autobús o vehículo privado y saldréis hacia Bruselas, donde terminará la excursión de un día a Ámsterdam.
Las visitas guiadas de un día a Ámsterdam varían según el itinerario y el tamaño del grupo. Algunos recorridos van directamente a la ciudad, mientras que otros serpentean por la campiña holandesa y hacen varias paradas.
Las excursiones de un día a Ámsterdam suelen hacerse en grupos pequeños y algunas están limitadas a sólo 15 turistas, lo que ofrece una experiencia más agradable y personal. Cuando llegues a la ciudad, harás un recorrido a pie para ver algunos de los sitios más conocidos, como la Plaza Dam, el Palacio Real y el Barrio Judío.
Una vez terminada la visita, tendrás tres horas para explorar Ámsterdam por tu cuenta. Algunos tours también incluyen una visita a una fábrica de artesanía local.
Un tour privado de un día a Ámsterdam te permite viajar más cómodamente en un vehículo con aire acondicionado. Incluso existe la opción de viajar en una limusina privada. La visita guiada es más rápida y dura entre 8 y 10 horas.
Comenzarás el día visitando una granja local para probar algunos de los mejores quesos de Holanda. Allí también verás los famosos zuecos holandeses hechos a mano.
Tras esta experiencia, llegarás a Ámsterdam y harás un tour por la ciudad con tu propio guía personal. Si lo deseas, podrás terminar el día con un recorrido por los canales.
Holanda es famosa por dos cosas: los zuecos y los molinos de viento, y en esta excursión de un día a Ámsterdam verás ambas cosas.
De camino a la ciudad cogerás un desvío que te llevará a los famosos molinos de Holanda. Además, si vas en primavera o verano, tendrás la oportunidad de admirar la gran cantidad de flores que crecen en los campos. Una combinación perfecta para conseguir una fotografía digna de National Geographic.
A continuación, iréis a un centro de artesanía local donde se fabrican productos tradicionales, como queso, cerámica y zuecos, antes de continuar hasta Ámsterdam para hacer una visita guiada a pie.
Las excursiones de un día tienen un precio inicial de 59 € e incluyen traslados de ida y vuelta en autobús desde el centro de Bruselas, así como un guía turístico profesional. También podrás beneficiarte de descuentos en restaurantes y chocolaterías locales.
Si optas por un tour privado a Ámsterdam, el trayecto a la ciudad será mucho más rápido. Se incluye el vehículo privado y un guía turístico y el precio es de unos 522 €. Si quieres viajar en limusina, el precio sube a 594 € aproximadamente. La visita guiada por los canales no está incluida.
Las excursiones de un día a Ámsterdam con una parada para ver los molinos de viento incluyen transporte y guía multilingüe, y tienen un precio aproximado de 61 €.
Si estás planeando un viaje de un día a Ámsterdam, asegúrate de incluir la Casa de Ana Frank en tu itinerario. Este renombrado museo está dedicado a la memoria de Ana Frank, una joven judía que se vio obligada a esconderse durante la ocupación nazi de los Países Bajos.
Durante su tiempo en la clandestinidad, Ana escribió un diario en el que documentó sus experiencias y compartió sus pensamientos sobre la guerra, así como el impacto que tuvo en su vida. La casa de Ana Frank permite a los visitantes caminar por el anexo secreto donde Ana y su familia se escondieron durante más de dos años.
Ver de primera mano el espacio donde Ana vivió y escribió su diario es una experiencia conmovedora que ofrece información sobre la realidad de la vida durante la guerra.
Las entradas para visitar el museo solo se pueden comprar por internet con antelación y los precios son los siguientes:
La Casa de Ana Frank está abierta de 9 h a 22 h todos los días.
Aunque Vincent Van Gogh solo vendió una pintura durante toda su vida, ahora es considerado uno de los artistas más influyentes de la era posimpresionista. El Museo Van Gogh alberga la mayor colección de obras del pintor en el mundo, y es una parada imprescindible para todo aquel interesado en su vida y obra.
Podrás admirar las pinturas, los dibujos y las cartas de Van Gogh a tu propio ritmo mientras paseas por las salas del museo. También podrás ver cómo su trabajo fue influenciado por los artistas holandeses que lo precedieron.
El museo Van Gogh está abierto a los visitantes de 9 h a 17 h de martes a jueves, y de 9 h a 18 h de viernes a lunes. La entrada cuesta 19 €, pero es gratis para los menores de 18 años.
Los canales de Ámsterdam son Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Fueron construidos en el siglo XVII para permitir el transporte acuático por la ciudad. Los recorridos por los canales te llevan a través de algunos de los barrios más históricos de Ámsterdam, como Jordaan y De Negen Straatjes (Las Nueve Calles).
También verás algunos de los lugares de interés más populares de la ciudad, como la Casa de Ana Frank y el Museo Rijks. Por último, pero no menos importante, disfrutarás del icónico paisaje de Ámsterdam desde el agua.
Si bien Ámsterdam se puede visitar en cualquier época del año, hay ciertos momentos en los que la ciudad está especialmente bonita. En primavera, Ámsterdam cobra vida cuando los tulipanes florecen y el clima se vuelve más cálido.
Sin embargo, la primavera es temporada alta, por lo que los sitios turísticos pueden llenarse de gente fácilmente. A aquellos que prefieran los climas templados les gustará explorar la ciudad durante esta época del año, ya que las temperaturas máximas alcanzan solo los 22 grados centígrados en verano.
El invierno también es una época mágica para visitar Ámsterdam, ya que la ciudad se adorna para la Navidad y los canales se congelan. Sin embargo, esta es también la época más fría del año, con temperaturas que alcanzan mínimos de unos 2 grados centígrados, por lo que si decides visitar la ciudad durante esta época, ¡tendrás que abrigarte bien!