Las calles palpitan con una energía que es al mismo tiempo histórica y contemporánea. En el aire flotan y se entremezclan deliciosos y apetitosos aromas de comida recién hecha, fruta fresca y café intenso. Y por toda la ciudad se respira un aire de vitalidad, auspiciado por siglos de grandes figuras literarias y políticas; así como por un legado histórico capaz de despertar la fascinación y el asombro que quien la visita.
Con todo esto, no es de extrañar que la capital de Colombia haya conquistado el corazón de viajeros, turistas y locales por igual, pero créenos cuando te decimos que ¡aún quedan muchos tesoros ocultos por descubrir! Así que, sin más preámbulos, ¡sumerjámonos de lleno en algunas de las mejores cosas que ver y hacer en Bogotá!
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1 – Pasea por la plaza de Bolívar
No hay mejor lugar para empezar esta aventura que con una visita a la plaza de Bolívar, joya cultural donde las haya y un espacio público y de reunión para los ciudadanos. Esta emblemática plaza recibe su nombre del conocido rebelde, soldado y político sudamericano Simón Bolívar, y está rodeada de toda una colección de edificios históricos espectaculares.
Acércate y contempla la impresionante catedral Primada, la primera iglesia de la ciudad, cuyas ornamentadas capillas y altos techos -por no mencionar su hermoso órgano- han atraído a fieles y visitantes por igual desde 1807.
A continuación, echa un vistazo al palacio Liévano, el magnífico ayuntamiento cuyas instalaciones culturales y administrativas sólo son igualadas por sus increíbles diseños y atractivo mobiliario.
Y asegúrate de dejar algo de tiempo para vagar por los alrededores, puesto que su belleza y popularidad convierten a este lugar en el sitio ideal para conocer más de cerca la vida local.
2 – Descubre donde comenzó todo con un recorrido por La Candelaria
Cada uno de los barrios de la capital tiene su propia personalidad, pero La Candelaria es sin duda uno de los más coloridos en todas sus variantes. No es de extrañar que esta zona tenga una identidad tan definida; después de todo, ¡aquí fue donde se fundó la capital en el siglo XVI!
Cabe decir que numerosas tribus indígenas de la zona ya consideraban esta área su hogar mucho antes de que se produjera un desarrollo urbanístico a gran escala, lo que sin duda convierte al barrio en uno de los más antiguos y reputados de la ciudad.
Con el paso de los siglos, su popularidad ha ido creciendo, convirtiéndolo en objeto de fascinación gracias también a la rica tradición de arte y música que ahí se ha cultivado, y que da al barrio un toque especial. Algo que se deja ver en los propios edificios, cuyas brillantes y coloridas fachadas alegran el corazón de cualquiera que se anime a recorrer sus calles.
Mientras exploras el barrio, aprovecha para entrar en la espectacular biblioteca Luis Ángel Arango, un lugar emblemático por tratarse de la biblioteca pública más grande de Colombia y ser una de las más visitadas del mundo. ¡No puedes perdértela!
Y acércate también hasta la plazoleta del Chorro de Quevedo, un espacio público colorido y animado en el que los artistas callejeros prueban suerte con sus números más arriesgados y en donde la gente local suele congregarse para pasar el rato. Además, ¡se dice que fue justo aquí donde se fundo la ciudad!
Si no sabes por dónde empezar con tantas opciones ¡hay multitud de visitas guiadas por el centro histórico y recorridos a pie que te ayudarán a conocer lo más destacado y asegurarte de que no te dejas nada!
3 – Explora la «rica» historia del Museo del Oro
Hay muchas cosas que ver y hacer en Bogotá que te deslumbrarán, y en el Museo del Oro encontrarás exposiciones que brillan por sí mismas. No se trata de un surtido de ornamentos y brazaletes cualquiera, sino de la mayor institución de su clase en toda América y, por tanto, el lugar al que acudir si quieres aprenderlo todo sobre este rutilante mineral.
Y aunque las exposiciones en sí son dignas de admiración, es la historia que hay más allá de su esplendor lo que las hace aún más fascinantes. En el museo descubrirás el papel que jugó el oro en las sociedades precolombinas como fuerza política, social y artística, y aprenderás sobre sus distintos usos en diversas comunidades indígenas.
Desde pequeñas joyas hasta enormes piezas ceremoniales, el museo cuenta con más de 55.000 objetos expuestos, así que asegúrate de dejar tiempo suficiente para explorar las diferentes salas detenidamente. Si la cantidad te resulta abrumadora y no sabes por donde empezar, siempre puedes reservar una visita guiada para ver lo más destacado de esta extraordinaria colección.
4 – Explora la obra maestra subterránea que es la Catedral de Sal de Zipaquirá
Es probable que, cuando coges tu salero para aderezar la comida, no seas consciente del proceso necesario a seguir para obtener ese mineral; ¡pero un viaje a la Catedral de Sal de Zipaquirá hará que no vuelvas a pensar en la sal de la misma manera!
Esta enorme mina subterránea ha suministrado sal a los colombianos durante siglos, y aunque las numerosas cámaras y cavernas son ya de por sí impresionantes, es la iglesia lo que realmente la convierte en un punto de interés único para los visitantes.
Construida como lugar de servicio y oración para los trabajadores de la mina, este evocador espacio cuenta con todo lo que cabría esperar de un lugar de culto corriente, ¡sólo que bajo tierra! Con sus solemnes altares y piezas de arte repartidas por varias salas, es una arquitectura espectacular en un entorno igualmente único.
También puedes visitar las Minas de Sal de Nemocón, en donde aprenderás sobre el proceso de extracción de la sal e incluso podrás ver uno de los mayores cristales de sal de la Tierra, ¡con forma de corazón!
5 – Deléitate con una ruta gastronómica por Bogotá
Platos apetitosos con docenas de sabores diferentes definen el paladar de la ciudad, ¡y los recorridos gastronómicos locales son la forma perfecta de degustar cada uno de ellos! Sigue a tu guía y descubre algunos de los mejores restaurantes de la zona, incluidos los favoritos de los lugareños y otros lugares clásicos.
En cada una de las paradas tendrás la oportunidad de probar distintas especialidades locales, desde el aborrajado (plátanos verdes fritos con queso), hasta el ajiaco, una sopa muy popular en el país hecha con pollo y patatas.
Súmale a eso multitud de pequeños aperitivos por el camino, además de buena bebida , ¡y ya tienes un plan perfecto para pasar el día!
6 – Disfruta de los encantos de Villa de Leyva
Si lo que buscas son la clase de paisajes que parece que solo existen en los libros, no dejes de visitar Villa de Leyva, un pueblo encantador que ha conservado gran parte de sus rasgos tradicionales originales a los que también se le añaden algunos encantos más recientes.
Combinando un precioso paisaje natural con una enorme gama de ofertas culturales, esta pequeña ciudad es como una foto congelada en el tiempo de la época colonial, y desde sus casitas chatas hasta sus grandes iglesias, toda la zona es historia viva. ¡Y eso incluso antes de que visites sus museos!
Retrocede hasta el Cretácico gracias a los extraordinarios fósiles del museo paleontológico, o pásate por Sol Música para conocer los increíbles misterios y la belleza que albergan las estrellas que brillan en la noche sobre nosotros.
Para algo de diversión, acude a la Casa Terracota, una casa de barro ligeramente surrealista que se construyó y coció al sol y que constituye el mayor proyecto de cerámica del mundo, ¡y no solo eso, sino que en su interior aún conserva todos los elementos que hacen de ella una residencia totalmente funcional!
Durante el camino de ida y vuelta al pueblo, disfrutarás de unas vistas asombrosas: desde estanques naturales hasta algunos de los otros pequeños caseríos que hacen de esta región un entorno tan especial.
7 – Sumérgete de lleno en la naturaleza visitando los mejores parques de Bogotá
Como toda ciudad que se precie, la capital está repleta de parques increíbles en los que puedes hacer turismo, relajarte y disfrutar de un lado más amable de la vida urbana. Algunos son más agrestes, mientras que otros hacen hincapié en la conexión de los espacios verdes con el mundo metropolitano, pero todos son lugares maravillosos para explorar.
El páramo de Sumapaz es un paraje natural de primera categoría a tan sólo un par de horas de la ciudad; con sus numerosas lagunas, sus poblaciones activas de fauna salvaje (si prestas atención puede que llegues a ver cóndores y osos de anteojos) y su paisaje andino barrido por el viento, cada paso que des te inspirará y asombrará a partes iguales.
Si prefieres quedarte por la ciudad, el parque metropolitano Simón Bolívar es un soplo de aire fresco en medio de un entorno urbano; además de sus exuberantes y enormes áreas de césped, sus arboledas y su llamativo lago, también cuenta con parques infantiles, un campo de golf y variedad de senderos por los que ir en bicicleta o pasear.
El parque nacional natural de Chingaza es ideal para los aficionados/as a las plantas y los animales, con una fauna maravillosamente diversa que incluye desde pacas y pumas hasta ocelotes y tucanes. Por otro lado, el parque metropolitano El Tunal ofrece un agradable ambiente comunitario, con sus vistas panorámicas y zonas específicas para que los niños disfruten y jueguen.
Justo en mitad de uno de los barrios más de moda de la ciudad, puedes explorar el parque de la 93, cuyos senderos rodeados por extensiones verdes te regalarán vistas y piezas de arte únicas. Y el parque de Usaquén es un paraíso para los y las visitantes; sus caminos están siempre salpicados de carritos de comida y vendedores ambulantes de arte, lo que favorece un ambiente animado y hace que un paseo por el lugar sea una experiencia inolvidable.
Mientras tanto, el parque de los novios es otro entorno natural y familiar en el corazón de la ciudad, con su hermoso lago y muchas zonas verdes que lo convierte en el campo de juegos ideal para los más pequeños. Por otro lado, el parque El Virrey es una opción perfecta para los más deportistas o para aquellos/as que busquen socializar; ya que está repleto de parques infantiles y carriles bici perfectamente dispuestos a lo largo del camino para poder dar un largo y tranquilo paseo.
Finalmente, no te pierdas el parque de la Independencia, uno de los parques públicos más antiguos de la ciudad; sus esculturas históricas y otros monumentos decorativos son testimonio de las diversas épocas que ha atravesado la ciudad. Además, es un entorno inmejorable por el que pasear.
8 – Profundiza y aprende sobre el legado del país en el Museo Nacional de Colombia
Cuando sientas que ha llegado el momento de perderte en la rica y compleja historia que caracteriza a esta nación, dirígete a las numerosas galerías del Museo Nacional de Colombia. Sus galerías y salas presentan al país desde todos los ángulos posibles, utilizando un enfoque propio que divide las diferentes partes de la colección según su campo de investigación.
En un momento dado, te encontrarás deslizándote por el pasado más remoto a medida que descubres las distintas muestras arqueológicas que alberga; al siguiente, serás consciente de los matices que caracterizan a las diferentes culturas de la zona y sus interacciones según atraviesas la sección etnográfica; y por último, te encontrarás frente a frente con obras maestras fascinantes en la sección de arte.
Al igual que el Museo del Oro, este lugar es tan extenso que resulta difícil apreciarlo por completo en una sola visita, por lo que es recomendable reservar una visita guiada. Pero elijas lo que elijas, no cabe duda de que ahí encontrarás una increíble variedad de objetos – ¡casi 20.000! – con el consiguiente legado que les acompaña.
Una opción es empezar tu visita por los comienzos primigenios de la región, cuando las diversas culturas indígenas que lo poblaban desarrollaron sus propias civilizaciones. Luego avanza en el tiempo y descubre cómo cambió todo cuando diversos migrantes y colonizadores se abrieron paso en el tejido cultural del país.
El museo tiene de todo: desde documentos de investigación hasta muebles antiguos y hermosos retratos. Cada una de sus secciones te invita a explorar el país de una manera diferente, pero puestas una junto a otra, narran la historia más completa y rica que se pueda contar de esta espectacular nación.
9 – Explora antiguas leyendas en el lago Guatavita
Para cuando llegues a las impresionantes orillas del lago Guatavita, seguro que ya el paisaje que le rodea habrá conquistado tu corazón; ¡y esa sensación no hará salvo multiplicarse a medida que explores el terreno! Enclavada en lo alto de los Andes, esta espectacular superficie de agua se encuentra contenida dentro de un antiguo cráter volcánico, aumentando así la sensación de estar frente a un paraje único y salvaje.
Por eso no es de extrañar que se rumoree que este lago es también el origen de uno de los mitos más populares de Sudamérica. Según la leyenda, éste fue el lugar que inspiró las historias de El Dorado, el legendario reino de oro que los conquistadores españoles se pasaron años buscando.
Sin embargo, lo que hoy en día sabemos con certeza es que estas aguas eran sagradas para la civilización muisca, que una vez llamó hogar a esta tierra, y que tanto el lago como su entorno, aun conservan parte de esa atmósfera tan especial que en su día les convirtió en fuente de leyendas.
10 – Recorre la ciudad en bicicleta
Con tantas identidades y elementos diferentes, ésta es una metrópolis que merece la pena explorar a fondo; ¡y hay pocas formas más fáciles (o divertidas) de hacerlo que pedaleando por sus calles en bicicleta! Respira aire fresco y disfruta de las vistas mientras recorres barrios extravagantes, hermosos parques, edificios imponentes y coloridos murales.
Un tour en bici es también una forma excelente de visitar algunas de las principales atracciones de la zona, como la imponente represa del Sisga, un precioso paraje rodeado de bosques y praderas.
Y ninguna travesía en bicicleta estaría completa sin participar en la Ciclovía de Bogotá, un evento semanal en el que más de 120 kilómetros de calles de la ciudad se cierran al tráfico, creando así un laberinto de emocionantes rutas perfectas para pedalear sin el estrés de los coches.
También puedes optar por un recorrido en patinete eléctrico, ya que son igualmente divertidos, cómodos y emocionantes. Gracias a su motor eléctrico podrás subir y bajar colinas y recorrer grandes distancias con facilidad y sin apenas cansarte. Desde lugares históricos y murales hasta plazas públicas y cafés, una ruta en patinete te ofrece una panorámica de la ciudad… ¡a ras de suelo!
11 – Sube en teleférico hasta el cerro de Monserrate
Si quieres una experiencia diferente, asciende hasta el cerro de Montserrate en teleférico y llega hasta lo más alto con una de las visitas guiadas que se ofertan. Esta magnífica colina es todo un icono local, elevándose sobre la capital como un gigante dormido, y te aseguramos que las vistas desde ahí arriba son absolutamente incomparables. Además, la subida en teleférico es una maravilla en sí misma. Una vez arriba, pasea la mirada (y tu cámara) a lo largo y ancho del valle y deléitate con una de las mejores panorámicas de la ciudad.
Antes de abandonar la cima de esa montaña mágica, visita el santuario de Monserrate. Se construyó en 1640, pero la espiritualidad del lugar se remonta a tiempo atrás, puesto que ya antaño ese mismo sitio tuvo un gran significado para las tribus de la zona. De una simple ermita, el lugar pasó a convertirse en una iglesia hecha y derecha, visitada por miles de fieles y viajeros curiosos a lo largo de los siglos. Presta atención a los ladrillos mientras la exploras, puesto que cada uno de ellos fue colocado por cristianos devotos durante el proceso de reconstrucción de la iglesia tras un terremoto.
12 – Observa variedad de aves en el parque natural de Chicaque
Disfruta de los cientos de aves, preciosas cascadas e interminables senderos a través de fascinantes bosques nubosos durante tu visita al parque nacional Chicaque. Este espacio salvaje se encuentra a tan solo una hora de la ciudad y está repleto de la biodiversidad natural que caracteriza a Colombia.
Se trata de todo un paraíso para aquellos que disfrutan con el vuelo de los pájaros y sus particulares cantos; con más de 200 especies de aves, merece la pena madrugar y llevar unos prismáticos contigo para aprovechar al máximo la oportunidad de observar algunas de estas aves únicas.
Y si, además, te gusta el senderismo, recuerda que tienes más de 20 kilómetros de senderos por los que deambular, incluida una caminata maravillosa (aunque puede resultar cansada) hasta la cima del pico del Águila, desde donde podrás disfrutar de unas vistas asombrosas. Con su combinación de paisaje y aventura, ¡este parque lo tiene todo!
13 – Contempla obras maestras poco ortodoxas en un tour de arte urbano
Como ya te habrás dado cuenta, es difícil girar una esquina sin encontrarte con murales y grafitis increíbles. Y es que la gran mayoría de estas coloridas piezas invitan a la reflexión de quien las observa, y están llenas de simbolismo e historia, además de adornar las paredes de muchos de los edificios de la ciudad. Para conocer todo lo que hay tras cada pintura y asegurarte de tener los mejores ángulos para apreciarlas, te recomendamos reservar un tour de arte urbano.
Pasea por los numerosos y animados barrios, incluida La Candelaria, y contempla las espectaculares obras que se despliegan ante ti y que a menudo muestran algunos de los momentos más duros y difíciles de la historia colombiana. Sin embargo, en ellas, incluso los elementos dolorosos se representan con cuidado y belleza, lo que les convierte en una metáfora perfecta de los esfuerzos del país por superar su tumultuoso pasado.
14 – Visita el Museo Santa Clara
Aunque el Museo Santa Clara sólo tiene unos 40 años, la magnífica iglesia que lo alberga ha sido una parte importante de la vida de la ciudad desde el siglo XVII.
Con su espectacular arte y sus imponentes espacios religiosos, la catedral ha sido testigo de gran parte de la evolución del país, proporcionando un lugar de culto y reflexión a todos aquellos/as que pudieran necesitarlo en mitad de continuos cambios sociales.
El museo contiene más de 140 obras únicas que representan las diversas etapas decorativas en auge durante el momento de máximo esplendor de la iglesia. Y a lo largo de las paredes y el techo, encontrarás aún más belleza, gracias a los elaborados murales y elegantes detalles que se entretejen en el propio edificio.
15 – Descubre las animadas calles e historias inspiradoras de El Paraíso
Cuando contemplas los edificios arco iris y las preciosas vistas de El Paraíso, ¡es fácil de entender por qué se le dio ese nombre! Pero la historia de este barrio es más compleja de lo que pueda parecer desde fuera, ya que se trata de una de las mayores favelas de la ciudad, un barrio tradicionalmente marginado cuya existencia ha estado marcada por diversas luchas económicas y sociales.
Aunque los orígenes de la comunidad son un tanto trágicos, en los últimos años ha experimentado una asombrosa revitalización, convirtiéndose en un centro de innovación, arte y activismo, y merece la pena reservar una visita para descubrir las facetas menos visibles y las fascinantes historias de una zona que tan a menudo ha sido subestimada.
Sube hasta arriba con el teleférico y pasea por sus numerosas calles serpenteantes, donde cada edificio y mural cuenta su propia historia de superación. Si buscas cosas que ver y hacer en Bogotá que ofrezcan una visión más profunda y honesta del lugar -así como una celebración de su progreso a lo largo de los años-, ¡una excursión a El Paraíso es imprescindible!
16 – Disfruta de la naturaleza en todo su esplendor en el parque nacional de Chingaza
Con una fauna espectacularmente diversa que incluye desde pacas y pumas hasta ocelotes y tucanes, el parque nacional de Chingaza es ideal para todo amante de las plantas y los animales. Pero, por supuesto, lo interesante aquí no es solamente lo que puedes ver, ¡sino también lo que puedes hacer!
El agreste paisaje andino es característico de la parte más montañosa de la zona, y con sus picos escarpados y amplias vistas, es un lugar perfecto en el que pararse a reposar y disfrutar del entorno. Pero este parque también ofrece atisbos de otros ecosistemas, desde la selva tropical hasta el fértil humedal.
Es una zona que merece la pena explorar detenidamente, mientras pasas de un clima a otro, observando las diversas criaturas que tienen aquí su hogar y admirando los cambios constantes en formas y colores de las plantas que ahí habitan. Y quién sabe… ¡puede que incluso veas un oso de anteojos!
17 – Vive una noche mágica en el estrafalario país de las maravillas de Andrés Carne de Res
Lleno de neón y decoración extravagante, nadie diría que la especialidad de este restaurante maximalista es la comida tradicional… aunque eso sí, ¡siempre con un toque único! Por supuesto, Andrés Carne de Rés es capaz de ofrecerte cualquier tipo de plato tradicional que desees, pero prepárate porque éstos siempre vienen acompañados de entretenimiento y diversión a raudales, sin mencionar su llamativa estética.
Estás en un lugar que se toma en serio la noche y que, por tanto, sabe darles a sus clientes lo que necesitan. Con sus múltiples pistas de baile, sus dinamizadores locales y una barra que no para de sacar bebida, ¡tienes plan hasta la madrugada! Pero junto con este ambiente enérgico, el local también sirve como una especie de centro de ocio polivalente, y cuenta con rocódromo y zonas de juegos para que los más pequeños también disfruten. De hecho, ¡tiene hasta guardería canina!
Es el lugar perfecto para disfrutar del lado más bohemio de la capital; ecléctico, enérgico, un poco salvaje: todo un espectáculo (¡en el mejor de los sentidos!). Así que ya sabes, si te estás planteando cuáles son las mejores cosas que ver y hacer en Bogotá, ¡aquí encontrarás uno de los mejores ambientes de la capital!
18 – Echa un vistazo a los productos artesanos del mercadillo de Usaquén
Otro lugar estupendo para llevarte algún recuerdo de tu visita a casa es este mercadillo tradicional, que constituye uno de los ejes centrales de la ciudad y es toda una delicia para los turistas. Se monta cada domingo en el barrio del mismo nombre, y es lugar de visita obligada si quieres mezclarte con los lugareños y, de paso, encontrar objetos únicos.
Aquí abundan las telas, la ropa y pequeñas rarezas, lo que te brinda la oportunidad de comprar algo verdaderamente colombiano sin caer en el cliché. Y, por supuesto, ¡qué clase de mercado que se precie estaría completo sin su sección de comida callejera!: ve picando de puesto en puesto mientras admiras las diferentes obras de artesanía expuestas ante ti.
Es una experiencia de compra estupenda (¡y cien por cien local!).
19 – Admira obras maestras en el Museo Botero
Deléitate con las impactantes esculturas que se alzan ante ti, y luego contempla las pinturas y bocetos que hay detrás: son solo una muestra del profundo talento de uno de los artistas más grandes del país. En el Museo Botero, sin duda aprenderás mucho sobre el propio Botero, pintor y escultor de talento único principalmente conocido por sus esculturas y pinturas que mezclan diseños casi caricaturescos con llamativos escenarios y comentarios políticos y sociales.
Pero, aunque el museo está principalmente dedicado a Botero, también podrás ver obras originales de otros aclamados artistas, desde la obra impresionista de Monet hasta el surrealismo de Dalí. Cada galería contiene un mundo propio gracias a las fantásticas obras de los genios del momento. ¡Culturízate y pásate por el Museo Botero!
20 – Contempla la iglesia de San Francisco
Con una ubicación casi anacrónica en pleno centro de la ciudad, esta encantadora iglesia católica data del siglo XVI.
De hecho, cuando se fundó en 1566, se convirtió enseguida en un pilar religioso y social de la comunidad; y hoy, como iglesia más antigua de la capital, continúa siendo un lugar en el que la historia y la cultura siguen encontrándose casi quinientos años después.
Desde sus maravillosas obras de arte hasta su impresionante retablo con su característica forma en U, no es sólo un lugar de acogida para peregrinos (aunque ciertamente cumple ese propósito como lo ha hecho durante siglos); sino que es también un pedazo de arte e historia vivo.
21 – Vuelve al pasado con una visita al Museo Quinta de Bolívar
Como cabe esperar de una casa de lujo convertida en institución cultural, el Museo Quinta de Bolívar está repleto de piezas y objetos que dan testimonio del amplio legado de los colonizadores y de sus conflictos, en concreto, ¡de uno de los personajes más famosos del continente!
Aunque la propiedad sirvió como casa de campo para miembros de la clase alta a principios del siglo XIX, su inquilino más famoso fue sin duda Simón de Bolívar, el conocido soldado y libertador.
Todas esas conquistas y rebeliones mantuvieron al comandante bastante ocupado, por lo que sólo vivió en la residencia un total de 423 días a lo largo de varios años; pero el tiempo que pasó allí fue determinante tanto para su progreso personal como para la historia del país.
En cada una de las salas pueden verse señales de estos legados entrelazados; en un momento estás en espaciosas habitaciones en las que se celebraban fiestas de la alta sociedad, y al siguiente, contemplas los escritorios y mesas donde se tomaron decisiones políticas que marcaron el curso del país y cuyas repercusiones todavía se sienten hoy en día.
22 – Adéntrate en el paisaje surrealista del páramo de Sumapaz
El principal ecosistema aquí es el espectacular páramo que da nombre al parque; un precioso matorral lleno de hierbas altas y plantas maravillosas.
Y es el tipo de paraje que ofrece a los y las visitantes dispuestos a explorarlo descubrimientos capaces de dejarles sin aliento, especialmente a quienes disfruten de ver cómo se unen todas las partes de un bioma… ¡incluidas sus culturas humanas!
Observa de cerca las conexiones únicas que se producen entre las distintas especies y elementos, y conoce las numerosas y diferentes sociedades que han interactuado con estos espacios naturales, incluida la civilización muisca, cuyas tradiciones espirituales estaban profundamente ligadas a la región.
23 – Contempla algunas de las cascadas más hermosas del mundo
Y para seguir con parajes naturales sobrecogedores, no te quedes sin visitar la magnífica cascada del Salto de Tequendama y aprovecha para conocer algunas historias sobre el lugar. A principios del siglo XX, esta zona inicialmente virgen albergaba un glamuroso hotel, pero la contaminación del río local obligó a cerrarlo, aunque el edificio todavía funciona como museo.
Las excursiones suelen incluir una visita a una granja local para probar los granos de café que se cultivan en esta exuberante zona, y culmina con un trayecto hasta un mirador desde el que admirar las cataratas. Mientras recorres la región, tus guías te contarán historias tan emocionantes como escalofriantes acerca del misterioso pasado de la región, en la que dioses perdidos y extraños escarabajos compiten por la atención de los oyentes en las leyendas populares de los colonos de hace miles de años.
¿Tienes ganas de más? Entonces visita La Chorrera. Según atraviesas los árboles que la ocultan, oirás el clamor de este impresionante salto de agua mucho antes de poner los ojos en él. No te engañamos cuando te decimos que es absolutamente espectacular. La Chorrera está a sólo una hora y media de la ciudad, pero parece un lugar absolutamente remoto, y lo creas o no, se trata de la cascada más alta de todo el país.
Aunque ofrece una vista espectacular en cualquier época del año, las cataratas son especialmente grandiosas después de lluvias fuertes, que es cuando el agua de más baja con una fuerza abrumadora. Y asegúrate de calzarte las botas de montaña, porque alrededor hay muchas rutas de senderismo que te ayudarán a conocer mejor este hermoso entorno. Si aun no has tenido suficiente, dirígete a la cercana cascada de El Chiflón para seguir admirando estas maravillas naturales.
24 – Visita los museos más fascinantes de Bogotá
Echa un vistazo a las cúpulas de la era espacial de Maloka, un parque interactivo de ciencia y tecnología donde puedes seguir la larga y extraña línea de la evolución en la Tierra, descubrir los átomos que componen el universo y adentrarte en un territorio aún más ignoto: ¡el comportamiento humano!
¡Y eso es sólo el principio! Partiendo de las diferentes disciplinas que componen las humanidades y las ciencias sociales, el Museo de la Independencia – Casa del Florero explora las fascinantes historias y los pequeños matices del movimiento de independencia de Colombia.
El MAMBO, el museo de arte moderno, inaugurado en 1963, es un fabuloso escaparate en el que contemplar las vibrantes obras de los artistas colombianos más actuales, incluyendo también bastantes contribuciones internacionales. Desde la fotografía a la pintura, pasando por la escultura, aquí hay arte a raudales y efectuado en todo tipo de medios. ¡Ah! Y todo ello con un gran contexto educativo para que la visita sea una fuente de aprendizaje.
Si lo que quieres es ver las joyas más famosas de la región, dirígete al Museo de la Esmeralda. Empezando por sus orígenes hace millones de años, en cada sala conocerás una faceta distinta y apasionante de la joya: su desarrollo geológico, la historia de su descubrimiento por el hombre y las muchas y asombrosas formas en las que se ha utilizado a lo largo de los años. Y si participas en alguna de las visitas guiadas de esmeraldas, ¡contemplarás algunos ejemplares asombrosos y descubrirás el extraordinario proceso de extracción y refinado de las mismas!
El Museo de Arte Miguel Urrutia es una celebración en toda regla de la creatividad de los últimos 600 años. Aquí se exponen más de 800 piezas, creadas por 250 maestros del arte. Sigue el sinuoso camino de la creatividad a través de los primeros movimientos del siglo XVI, pasando por los numerosos experimentos artísticos del siglo XX, hasta llegar a algunas de las obras maestras contemporáneas más fascinantes.
Durante 200 años, el país se ha visto definido en mayor o menor medida por sus numerosos conflictos, desde guerras civiles a conflictos internacionales y toda clase de rencillas entre medias. Todo esto se expone en el Museo Militar de Colombia, donde tendrás la oportunidad de contemplar diminutas maquetas de poderosas naves, uniformes pulcramente planchados e incluso aviones a tamaño real, entre otros. Pero en este espacio hay algo más que armamento y maquinaria; varias galerías muestran los logros particulares de cada rama del ejército, mientras que otras profundizan en temas complejos como la lucha por la independencia y el impacto de la guerra en las vidas corrientes de los civiles.
El Museo de Bogotá Casa Sámano ofrece diferentes recorridos que se centran en explorar la ciudad a través de diferentes marcos, como la edad, la raza y la clase. Todos ellos reflejan la asombrosa diversidad de objetos e ideas que se exponen aquí, como un espejo de la hermosa complejidad que posee la propia ciudad… ¡y sus habitantes! Y no solo se centra en el pasado, sino que esta institución también ofrece algunas perspectivas del presente en constante evolución.
En la Casa de la Moneda descubrirás todos los entresijos detrás de la fabricación de monedas, billetes y todo el resto de piezas que componen el sistema financiero. El museo se encuentra en el impresionante Banco de la República, que tiene una historia muy distinguida: ¡fue aquí donde se fabricaron las primeras monedas de oro de América! Además, descubrirás la fascinante trayectoria que han ido tomando las finanzas a lo largo del tiempo, desde las primeras economías de trueque de la época precolombina hasta los diseños geniales y extravagantes que adornan los billetes modernos.
Finalmente, el Museo Colonial se vale del arte para explorar la larga y difícil historia de la influencia europea en el país. Aunque se fundó originalmente en 1942, la sede del museo se remonta aún más atrás en la historia local, primero como claustro y luego como edificio político. La mayoría de las piezas proceden de colecciones privadas, lo que da un agradable toque ecléctico a la colección; y mientras admiras la asombrosa variedad de piezas (¡unas 1.577!), descubrirás cómo las iglesias católicas echaron raíces y florecieron en Colombia a lo largo de los siglos.
25 – Tómate un café colombiano a tu manera
Los granos de café colombianos están entre los más valorados del mundo, por lo que no es de extrañar que las cafeterías de la ciudad sean famosas por su forma de prepararlo, ¡además de por el ambiente único que proporcionan que hará que no te quieras marchar!
El Café Azahar ofrece un ambiente fresco y contemporáneo para disfrutar de un café propio y artesano, mientras que Amor Perfecto es famoso por sus ricas mezclas de café de selección y por su predisposición a educar a los y las amantes del café sobre ellas. Pásate por Café Cultor para charlar con sus estupendos baristas, una serie de profesionales que te guiarán en la elección para conseguir que tu experiencia cafetera ahí sea como ninguna antes; o acude a Tropicalia Coffee para comprar granos de alta calidad directamente procedentes de productores de la comunidad. Para saborear la diversidad del país de un solo trago, siéntate en Colo Coffee, cuyo café refleja a la perfección la frescura de las montañas y la humedad la selva, pasando por el resto de paisajes que caracterizan la zona.
Una vez que hayas probado cada uno de los increíbles cafés que la ciudad te ofrece, ¡es hora de salir al campo y ver cómo se hace! Las visitas a las granjas de café locales son como un curso acelerado de historia, artes culinarias y ciencias medioambientales, y además, ¡las vistas de los alrededores serán de las más bonitas que veas en tus vacaciones! Sigue el viaje que efectúa el grano desde el arbusto hasta la fábrica y la taza, y disfruta aprendiendo con cada parte del proceso. Por supuesto, ningún recorrido estaría completo sin probar el producto final, ¡saborea cada sorbo del mejor café de Colombia!
26 – Goza de experiencias gastronómicas inigualables
El tour de la cerveza es sin duda una de las cosas más divertidas que hacer en Bogotá. Disfruta del ambiente y la cerveza fresca de la Cervecería Gigante, o prueba toda la gama de bebidas locales y deliciosos burritos que ofrece Papaya Gourmet.
Refréscate en El Mono Bandido mientras te diviertes con sus espectáculos en directo (¿te hemos dicho ya que hay magia?), o dale una oportunidad a las cervezas caseras de Dos Carreras, que también ofrece todo tipo de diversiones, desde ping-pong a exposiciones de arte. Y entre trago y trago, ¡puedes incluso animarte a practicar el deporte nacional! Los juegos de tejo fueron inventados originalmente por las tribus locales, y su popularidad no ha dejado de crecer desde entonces, con algunas modificaciones bastante interesantes a lo largo de los años. ¡No te lo pienses y anímate!
Para saborear el lado más dulce de la ciudad, no dejes de probar el chocolate Santafereño, que es muy apreciado en toda Colombia y se puede encontrar en cafeterías de toda la ciudad. Sin embargo, no te engañes, ya que ¡no se trata de una taza de cacao corriente!
Elaborado con barras de cacao fresco mediante un complejo proceso de maceración y batido, la bebida lleva un ingrediente secreto en el fondo de la taza: ¡una sustanciosa cucharada de queso! Aunque la combinación pueda parecer algo extraña de primeras, te sorprenderá lo maravillosamente bien que casan los sabores dulce y salado. Y si quieres satisfacer aún más tu antojo de azúcar, ve a Trufelinos y elige entre su amplio surtido de golosinas, todas ellas elaboradas a base del irresistible cacao colombiano.
Acércate al Mercado de Paloquemao y prueba alguno de sus productos. A pesar de que este emblemático lugar ofrece casi todo tipo de alimentos, es particularmente conocido por la fruta. Durante tu visita, podrás probar un poco de todo y descubrir las fascinantes historias humanas y naturales detrás de los deliciosos manjares frescos que ahí se venden, al mismo tiempo que aprendes cómo incorporarlos a tus platos.
Cuando llegue la hora de la comida, opta por hacer una parada en algunos de los mejores restaurantes de la ciudad. Bogotá no lo pone nada fácil, ¡ya que hay una cantidad vertiginosa de ellos entre los que elegir! El restaurante Leo te hará viajar culinariamente a través de las diversas biosferas del país. Mientras que El Chato se centra en versiones contemporáneas de platos clásicos, todos ellos con ingredientes de temporada.
Dirígete a Mesa Franca para probar platos inspirados en todo tipo de elementos, desde las culturas indígenas hasta los productos agrícolas locales; o pásate por Pajares Salinas para degustar platos tradicionales y su fabulosa selección de tapas. Y no te pierdas Santa Fe Restaurante, un espacio vibrante y colorido que sirve algunos de los mejores platos de carne y pescado de la ciudad, además ofrece más de 70 vinos tanto sudamericanos como europeos.
27 – Pásatelo en grande con las mejores aventuras al aire libre
Una vez hayas llegado a lo más alto de montañas y miradores panorámicos, puede que te preguntes si hay alguna forma de ver todavía más. Pues si eres el tipo de persona a quién le gusta la adrenalina, estás de suerte, ya que hay otra opción fantástica para explorar el país desde las alturas: ¡el parapente! Si te animas a hacer parapente, contarás con la ayuda de un instructor o instructora que te guiará en tu vuelo mientras contemplas la hermosa capital y sus ecosistemas circundantes. ¡Da el salto y disfruta de unas vistas realmente mágicas!
Con las rutas a caballo subirás por las montañas, atravesarás densos bosques y pasarás por algunos de los parajes más bellos que ofrece la zona. Lo mejor de estos paseos es que no es ningún problema el no haber montado antes, ya que los guías te asignan cuidadosamente el caballo perfecto para que disfrutes al máximo de la experiencia. Aventúrate a explorar las escarpadas cumbres de los Andes, o sube por los sinuosos y pintorescos senderos que conducen a los queridos picos de Monserrate y Guadalupe.
Si no te importa mojarte, ¡es hora de vivir emociones fuertes por el río! Y no, no se trata de un crucero panorámico, sino de una aventura de remo. Seguro que lo has adivinado ya, ¡nos referimos al rafting! Podrás disfrutar de una mezcla de opciones de Clase III y Clase IV, lo bastante desafiantes como para ofrecer una buena descarga de adrenalina, pero también hay opciones para que los más novatos o novatas se sientan a gusto. Navega por los dinámicos rápidos y aprovecha para disfrutar del paisaje mientras flotas.
28 – Disfruta como nunca en parques de atracciones
Coge a todo el grupo y dirígete al Salitre Mágico, un lugar que hace más que honor a su nombre. Este entretenido parque de atracciones ha sido uno de los principales destinos de entretenimiento en la ciudad desde hace 50 años y cuenta con atracciones de todo tipo. Compite en karts, galopa por un laberinto dentro de un castillo o enfréntate cara a cara con gigantescos monstruos marinos, ¡robóticos, por supuesto!
Y si quieres aún más adrenalina, date un chapuzón desde 35 metros de altura en Supershot, déjate llevar a toda velocidad por las montañas rusas Magnus y Double Loop, o abróchate el cinturón para dar vueltas y vueltas en Centrox, que te hará girar a velocidades vertiginosas de hasta 100 kilómetros por hora. Ya lo sabes, ¡este es un parque en donde todo el mundo puede encontrar algo con lo que divertirse!
Por otro lado, el parque de atracciones Mundo Aventura, ofrece diversión para todas las edades. Los más pequeños podrán disfrutar de montañas rusas en miniatura, paseos en barcos piratas y parques infantiles, mientras que el resto de la familia puede optar por una mezcla de atracciones clásicas, como carruseles y paseos en troncos, y experiencias únicas como el Teatro 5D.
Y si tienes ganas de aventura de verdad, elévate por los aires en el Sky Coaster, o prueba el campo de batalla simulado de Quantum. Asegúrate de tener tiempo para todos los juegos… quién sabe, ¡puede que ganes algún premio nuevo!
29 – Compra todo tipo de recuerdos en tiendas locales o centros comerciales
El Pasaje Rivas es un mercado textil tan grande y laberíntico que resulta fácil perderse, pero en el que siempre encontrarás algún tesoro oculto. Ya estés buscando materiales para tu próximo proyecto de costura como si sólo quieres ver cómo lo elaboran los lugareños, este es un lugar en el que pasarse horas enteras serpenteando por sus pasillos. Además de hilos, sedas y otros materiales, aquí hallarás cualquier tipo de objeto de lo más inesperado, desde muebles y cunas hasta juguetes y juegos. Si buscas piezas auténticas y únicas, ¡no te lo pierdas! Dale a tus compras un toque cultural en el Pasaje Rivas. Es una de las mejores cosas que hacer en Bogotá durante el día.
En cuanto a centros comerciales, en el centro comercial Santa Fé encontrarás una amplia variedad de restaurantes, un parque infantil y una sala de juegos para que los niños disfruten, y marcas que abarcan todo tipo de productos, desde ropa hasta cannabis. Por otro lado, también tienes el enorme centro comercial Andino, más especializado en moda, accesorios y tiendas de lujo de marcas nacionales e internacionales.
Y no podemos pasar por alto El Retiro, que mezcla lo chic y lo inusual; dentro hay oficinas de turismo y tiendas de moda, pero también restaurantes de lujo y arte curioso directamente incorporado en la arquitectura del edificio. Se trata de un lugar maravilloso para pasar el día. Pero te avisamos, ¡es posible que salgas de ahí con tantas compras que luego necesites otra maleta!
30 – Más parajes naturales que merecen una visita
El jardín botánico fue inspirado por José Celestino Mutis, que ayudó a fundar algunos de los primeros estudios botánicos de la zona en el siglo XVIII. Por tanto, que no te extrañe ver en un momento dado a investigadores admirando especímenes particulares, observadores de aves a la espera de ver revolotear a sus amigos con plumas o talleres en directo que muestran y celebran los métodos agrícolas tradicionales. Aunque simplemente seas un transeúnte casual, este paraíso urbano te sorprenderá.
En el observatorio de colibríes podrás admirar de cerca a estos pequeños seres voladores: 14 especies únicas llaman hogar a esta región y, gracias al cuidado de científicos y ecologistas locales, aquí puedes verlas en pleno vuelo y maravillarte con sus veloces alas en movimiento y con cada sutil variación de color. El espacio no sólo es relajante y bello, sino también de vital importancia para estas diminutas criaturas, que dependen de un ecosistema vibrante para seguir prosperando.
Además, las excursiones de observación de aves forman parte del programa, y es que no hay nada como unirse a entusiastas y expertos por igual en una visita guiada por el refugio, aprendiendo todo acerca de los increíbles animales que se mueven a tu alrededor.
31 – Descubre los infinitos tesoros del Centro Cultural Gabriel García Marquez
Entre los muchos pesos pesados en el ámbito de la cultura de la ciudad, hay uno que destaca por encima del resto en el campo de las letras: Gabriel García Márquez. Aunque el magistral autor de clásicos del realismo mágico como Cien años de soledad y El amor en los tiempos del cólera sólo vivió en la capital durante un breve periodo de su infancia y juventud, fue allí donde inició la carrera de escritor que terminaría por convertirle en uno de los autores más reconocidos de Colombia.
Así que no es de extrañar que uno de los mejores centros culturales de la ciudad lleve su nombre y continúe su legado de compromiso público con los ciudadanos de Colombia, ¡y con los visitantes, por supuesto!
Desde su amplia sala de exposiciones (que suele albergar tanto obras únicas como muestras itinerantes) hasta su auditorio para espectáculos, éste es un lugar que promueve las artes en todas sus formas. Si buscas una visita más relajada, también puedes pasarte por la librería, que cuenta con una fabulosa colección de obras en español de diversos géneros, además de una estupenda terraza donde disfrutar de las mismas vistas montañosas que contempló en su día el ahora difunto escritor. ¡Añade esta visita a tu lista de cosas que ver y hacer en Bogotá!
32 – Visita los mejores teatros y disfruta de sus espectáculos
Desde su inauguración en 1895, el Teatro Colón ha sido un faro en la escena cultural de la ciudad, tanto como espacio para producciones de gran calidad como por su espectacular arquitectura. Construido en estilo neoclásico italiano, el espacio sirve como palacio general de las artes, con obras de teatro y conciertos programados periódicamente sobre su magnífico escenario.
Merece la pena que dediques un rato a explorar detenidamente el espacio; sus detalles artísticos y de diseño lo convierten en mucho más que un teatro al uso. Mira hacia arriba y echa un vistazo al techo ornamentado y coronado por una espectacular lámpara decorativa rodeada de pinturas de las musas griegas. Luego sube a la quinta planta para explorar la Sala Mallarino, un pasillo de espejos donde se realizan los ensayos de danza generalmente acompañados de suaves melodías de piano. Po último, acomódate en tu asiento de felpa y, cuando se levante el telón espectacularmente pintado, ¡prepárate para sentir la magia del teatro y las actuaciones!
El Teatro Mayor también es uno de los pilares artísticos de la ciudad, con una increíble programación de espectáculos cada temporada. Nunca sabes realmente lo que te vas a encontrar aquí -conmovedoras piezas musicales, obras de teatro de vanguardia, danzas que llevan al límite el cuerpo y la imaginación-, pero lo que siempre está garantizado es que sea lo que sea, será un espectáculo increíble.
33 – Disfruta de aún más entretenimiento en Bogotá
Las clases de salsa son la forma perfecta de sumergirte en este querido estilo de baile, que triunfa en clubes y bares de toda la capital. Aunque seas primerizo/a, lo pasarás en grande con estas dinámicas y acogedoras clases. En ellas, contarás con la ayuda de profesores expertos/as que te guiarán a través de pasos básicos y los movimientos más sencillos y divertidos. Y si después de la clase te sientes con ganas ¡saca a la calle tus nuevos pasos y deslumbra a tus amigos!
Tanto si te encantan las joyas hechas a mano como si eres un romántico empedernido en busca de un regalo único para esa persona especial, ¡no hay nada como un taller de forja de anillos para poner a prueba tu creatividad! Entre sus muchas joyas naturales, Colombia cuenta con una muy famosa: ¡las esmeraldas! Acércate a un taller del famoso distrito joyero de la ciudad y disfruta de tres horas inolvidables aprendiendo todo lo necesario sobre la famosa piedra a la vez que conoces los fundamentos básicos para elaborar tus propias piezas únicas.
En el planetario de Bogotá descubrirás todo sobre las constelaciones, planetas y galaxias que nos rodean, y serás testigo de las sorprendentes acciones del universo que rara vez somos capaces de ver por nosotros mismos. Pero también podrás ver algunos espectáculos fantásticos como «Universo viviente» en los que se explora esa pregunta constante: ¿hay vida también ahí fuera?
¡Y la diversión no acaba ahí! La misma cúpula que muestra estas visiones del espacio exterior también se utiliza para proyectar espectáculos del ámbito científico y artístico. Las proyecciones láser y espectáculos de luz son especialmente asombrosos y suelen acompañarse de éxitos musicales como Queen, Coldplay y Daft Punk. ¡Es una experiencia extrasensorial!
Con un legado que se remonta a casi 90 años, los aficionados/as al fútbol no pueden perderse un partido en el estadio Nemesio Camacho. Situado en la parte noroccidental de la ciudad, sus 39.000 localidades suelen están siempre llenas, ya que los partidos entre equipos nacionales e internacionales se disputan de forma emocionante sobre el terreno de juego. Incluso puedes reservar visitas guiadas a este increíble espacio y ver el legado que hay detrás de este deporte. Y, por supuesto, si tienes la oportunidad, ¡no hay nada como ver un partido cuando el equipo local Independiente Santa Fe se enfrenta a sus competidores!
Con su deslumbrante horizonte y su energía única, Bogotá es la ciudad perfecta para disfrutar de una o dos copas desde los mejores bares de azotea. Aunque el Astoria Rooftop se inspira en gran medida en el famoso hotel neoyorquino, cuenta con muchos toques puramente locales, desde sus platos tradicionales hasta sus ingeniosos cócteles con mezclas típicas del lugar.
En lo más alto del hotel Hilton, Sky 15 Rooftop ofrece toda una gama de delicias, desde café tradicional a rones locales, con excelentes sesiones de DJ que aportan animación y música de fondo. Y en el BrewPub Rooftop, puedes disfrutar de ricos bocados -desde hamburguesas hasta langosta-, además de bebidas y música en directo todas las noches. Elijas el lugar que elijas, tu bebida irá acompañada de una experiencia única.
¿Cómo llegar a Bogotá?
El Aeropuerto El Dorado es el lugar perfecto para comenzar tu aventura, ubicado muy cerca de la ciudad. Además, puedes optar por variedad de traslados de aeropuerto para que todo el proceso de llegada sea aún más fluido. Igualmente, cuando tu viaje llegue a su fin, puedes reservar este mismo servicio de vuelta.
¿Dónde alojarse en Bogotá?
Desde el momento en que llegues al Casa Dann Carlton Hotel & Spa, te sentirás como un auténtico miembro de la realeza, ya sea tomando cócteles en la terraza o dejando que un masajista te quite toda la tensión y el estrés antes de salir a explorar la ciudad.
O dirígete a Tequendama Suites, en donde podrás disfrutar de servicios de clase similar (como baños turcos y saunas) en una ubicación perfecta justo en el corazón del barrio Centro Internacional.
El HAB Hotel Bogotá está situado muy cerca de lugares de interés como el estadio El Campín y cuenta con todo tipo de lujos, como su fabuloso restaurante y un precioso jardín.
Y en el Ibis Bogotá Museo puedes empezar fuerte el día con un copioso desayuno buffet y luego ir directamente a lugares de interés como el Museo Nacional y el Museo del Oro, antes de volver por la noche a relajarte en tu cómoda y moderna habitación.
Por último, también puedes optar por hospedarte en el Hotel Virrey Park, donde tendrás al alcance de la mano muchos de los bares, restaurantes y zonas comerciales más populares de la ciudad.
¿Visitas Bogotá con poco presupuesto?
La capital es realmente una ciudad para todos los gustos, ¡y es posible ver muchos lugares emblemáticos sin tener que derrochar! Prueba alguno de los free tours de Bogotá, en donde la información y la historia sobre la ciudad se acompasan al ritmo de tus pasos a medida que atraviesas calles fascinantes en compañía de un lugareño/a.
Con una historia tan larga y llena de matices, no es de extrañar que estos recorridos abarquen toda una amplia gama de temas; puedes hacer un tour inicial por las principales atracciones, admirar los vibrantes colores de los grafitis de la ciudad o profundizar más sobre temas complicados, como los esfuerzos por reconstruir y promover la paz tras décadas de guerras del narcotráfico. Si tienes tiempo, merece la pena que hagas varios de estos tours para que puedas hacerte una idea aún más completa de esta fascinante ciudad.
Y para aprovechar todo lo que ofrece la capital, asegúrate de hacerte con el Bogotá City Pass a tu llegada. Este pase sirve para acceder a más de 20 atracciones principales y experiencias, desde museos y talleres hasta visitas a cafetales, degustaciones de comida y bebida, y excursiones de un día a lugares de interés como la catedral de Sal.
Además de la comodidad que supone, el pase ofrece descuentos en los precios de entrada a todos esos lugares, así como la flexibilidad de mezclar y combinar tu propio horario. Incluso incluye traslados de ida y vuelta al aeropuerto.
¿Adónde ir después?
Con una capital tan asombrosa, no es de extrañar que el resto del país tenga destinos igual de espectaculares. Para empezar, hay excursiones de varios días desde Bogotá excelentes, en las que puedes explorar monumentos cercanos como las notables ruinas de San Agustín o disfrutar de la belleza de parajes naturales como el río Caño Cristales antes de regresar a la ciudad.
Siguiendo con otras ciudades que visitar en el país, echa un vistazo a todas las cosas que ver y hacer en Medellín, situado más al norte; un lugar que ha superado años de luchas sociales para convertirse en una de las metrópolis más florecientes de Sudamérica y que alberga una variedad de atracciones fascinantes.
O descubre un paraíso caribeño echando un vistazo a las mejores cosas que ver y hacer en Cartagena, cuna de inspiración literaria, legados piratas y culturales que muestran toda la trayectoria de la historia colombiana… ¡por no mencionar unas playas increíbles y un mucha fiesta!
Y, por supuesto, encontrarás una gran selección de cosas que ver y hacer en Cali, apodada la «Capital Mundial de la Salsa». Pero más allá del baile, su rica herencia afrocolombiana brilla en sus festivales y gastronomía. Sin duda, se trata de una visita obligada para disfrutar del auténtico ritmo y estilo colombianos.
Si quieres embarcarte en una aventura que traspase las fronteras colombianas, comprueba todo lo que ofrece Ciudad de Panamá, y visita tanto Aruba como Quito.
Reflexiones finales
Tanto si estás saboreando el tranquilo silencio de las montañas como disfrutando de la adrenalina de un festival o un acontecimiento deportivo, un viaje a esta maravillosa ciudad supone enamorarse para siempre de sus ritmos y cultura. Merece totalmente la pena adentrarse en la historia de la ciudad, su arte, naturaleza y, en general, en todo lo que ofrece.
Con nuestra lista de cosas que ver y hacer en Bogotá te garantizamos que disfrutarás al máximo de tu visita y puede que hasta te quedes con ganas de más.
¡Feliz viaje!